jueves, 26 de marzo de 2009

SIMPLEMENTE


Simplemente, el recuerdo, el recuento de aquellos instantes en que te hice feliz, ese momento en que tu sonrisa nacía de tu cara en una inmensidad... La inmensidad del alma.
Simplemente recuerdos de aquel instante en que el aire nos acariciaba y el tiempo no era suficiente para mirarnos. En que los secretos no importaban porque no son nada, en que la vida pasada era vida, quizá el infierno al que se aferran los sentimientos, o el cuerpo o hasta el corazón, pero no el alma… y simplemente ahora mi alma te aclama, necesita de aquel ángel que aun no sale de aquí.
Quizá no entiendas digo respuestas jamás te he dado, pero yo si entiendo que simplemente el tiempo no perdona, y las acciones del pasado arremeten en el presente, lo se, lo respeto pero no seré jamás aquella que acepte, seré un guerrero, que espere siempre tu respuesta, tu si o tu jamás, tu nunca o tu ahora.
Por que lo que hace que algo se realice siempre es el pensamiento la fuerza en la mente y el alma, y en ambas esta presente, tan presente como la luna en la noche, como la nube en el cielo, como la hoja en el árbol, como el agua en el mar, como el canto en el ave o simplemente el amor en la humanidad.